jueves, 14 de mayo de 2020

Día de la Agricultura. Representaciones pictóricas.


Hoy, 15 de mayo, es el Día de San Isidro Labrador, patrón de Madrid y de los agricultores. El primer laico casado que fue canonizado, un agricultor incansable que a Dios y a su Familia ofreció lo mejor de su cosecha. Poco se habla de San Gregorio Ostiense, predecesor a San Isidro Labrador, y a quién los agricultores nos encomendamos para que nos libre de toda plaga.
Quería hacer, hoy, un repaso a las principales representaciones pictóricas de la agricultura, profesión noble donde las haya y definida por Cicerón como "la profesión propia del sabio, la más adecuada al sencillo y la ocupación más digna para todo hombre libre". He puesto, de cosecha propia, a Gonzalo Bilbao, Francisco de Goya, Valeriano Domínguez Bécquer y el pintor noruego Hans Dahl. También, ha contribuido mi buena amiga y estudiante de Bellas Artes en el Politécnico de Valencia, Dª Ana Roda, quién contribuyó con los cuadros de Courbet y de Breton.
Jean-François Millet - Gleaners - Google Art Project 2.jpg
Las Espigadoras (Des glaneuses)
Empezaremos hablando de este conocido cuadro del pintor francés del Realismo, Jean-François Millet, pintado allá por 1857 con la técnica de óleo sobre lienzo. El realismo que parió genios literarios como Baudelaire, Honoré de Balzac, Charles Dickens, Fiódor Dostoyevski, Tolstoy, o nuestros compatriotas, Perez Galdós o Leopoldo Alas "Clarín", también parió artistas pictóricos de este calado. Esta obra de arte representaba una realidad tan cruda y tan tangible como la de las paupérrimas condiciones a las que los agricultores siempre hemos estado sometidos. Se expuso aquel mismo año en el Salón de París ante las alarmistas reclamaciones de la clase alta, quiénes lo veían como "horrendo" y "antiestético", cuando realmente, les recordaba que la Patria la hacemos quiénes tenemos callos en las manos, quiénes nos desgarramos los riñones y trabajamos en el campo. Imagen de reivindicación patriótica francesa.

Luis Buñuel y "El ángelus" de Millet
El Angelus 
Millet - junto a Courbet y Breton - será el protagonista casi absoluto de esta entrada pues a Las Espigadoras y a este cuadro que vamos a analizar se unirán también "Los sembradores de patatas" y "El aventador de trigo". Millet fue el máximo exponente de la Escuela de Barbizon, contraposición al Romanticismo con exponentes como Géricault o Delacroix. Esta Escuela tenía como objeto el pintar paisajes rurales, apartados de la civilización e intentar mostrar la realidad, por cruda que fuese. El Ángelus se pintó entre 1857 y 1859, y es un cuadro, que a mí, en particular, me resulta bastante precioso y emotivo, pues es la máxima representación de la vinculación existente entre el ancestral trabajo en el campo, la tradición religiosa y el sentir nacional. Parece descabellado, pero muchos agricultores rezaban todos los domingos - o tres veces diarias - el Ángelus, del que en cada tres textos se recitaba un Ave María. Es una imagen costumbrista, que muestra la penuria económica a la par que el alto espíritu moral de los agricultores. A destacar la obsesión de Salvador Dalí con el hecho de que este cuadro mostraba una imagen perturbadora, como dejó escrito en unos textos suyos, ya que aseguraba que no solo había una cesta en la parte inferior del cuadro, sino que traía oculta la tumba de un niño de seis años. El Louvre hizo radiografías y lo único que pudo encontrar fueron manchurrones de pintura y una gran brecha en el lienzo, como consecuencia del ataque de un perturbado con un cuchillo en 1.932.

Obra de Arte - El Aventador - Jean-François Millet
El Aventador
Precursor de estos cuadros, aparece el casi olvidado "El Aventador", que también fue expuesto en el Salón de París el mismo año de su finalización, en 1.848. Fue esta pintura la que inició su serie de obras de arte acerca de las duras condiciones de la vida rural y de los campesinos, algo que le afearon desde las altas esferas, intentando tildarle de agitador. Los jóvenes del lugar probablemente no lo sepan, pero era algún muy común en épocas de nuestros ancestros cuando no había trilladoras, que al recogerse el trigo - también la paja, el grano, los cereales o cualquier cultivo - se 'aventase' o lanzase al viento para que se esparciese de forma que pudieran separarse.

El Poder del Arte: Los sembradores de patatas,obra de Jean ...
Los sembradores de patatas
El último de los cuadros de Millet, protagonista absoluto de esta entrada, y que fue pintado alrededor de 1.861. Se ve a un matrimonio de agricultores - como mis padres, mis abuelos - en sus cultivos. El hombre dando a la azada y la mujer cultivando, una bonita estampa que vincula la auténtica libertad campestre con la familia, vector principal de la sociedad y de la Patria, que mañana también celebra su día.

La bendición de los campos de trigo en Artois | El pan de los pobres
Bendición del trigo en Artois
Jules Breton fue otro pintor realista que también "cultivó" - y valga el sentir de la palabra - el arte campestre, evocando imágenes no solo del sufrimiento y el duro trabajo, sino la celebración, la bendición que siempre se había hecho en las zonas rurales de su Courrières natal. Una bendición en la que participaban las chicas que recién habían recibido su primera comunión, el clero y los esforzados trabajadores que pedían para sus cosechas. Imagen realista en el sentido de que muestra la importante vinculación espiritual con la agricultura. Este cuadro se presentó en el Salón de 1857, bien fuese porque no presentaba una imagen tan dura como Las Espigadoras de Millet, su cuadro alcanzó gran relevancia y reconocimiento. Sea como fuere, Bréton se convirtió en el artista oficial de la vida campesina, desde su entrada a la Academia de las Bellas Artes en 1886.
La retirada de las espigadoras (Jules Breton, 1859) | Pinturas del ...
Llamada de las espigadoras
Breton pintaba mucho acerca de la vida cotidiana y campesina de su localidad natal que era Courrières - en la histórica región francesa de Artesia, limítrofe con Flandes y que tuvo la desgracia de sufrir en 1.906 un accidente minero - y llegó a retratar la retirada de las espigadoras tras una ardua jornada, encabezadas por la principal de la cuadrilla. Detalles realistas como sus vestimentas sucias y rasgadas, pero idealización del trabajo agrícola como esfuerzo, dedicación y plenitud humana.

El Canto De La Alondra Por Jules Breton de Adolphe Sin Marco ...
El canto de la alondra
Pintado en 1.884 también por Bréton, es sin duda el cuadro más evocador y bonito que tiene. Familiar, cercano y muy personal. Una muchacha campestre, ataviada con sus sencillas vestimentas que parecen arreguñadas, un pañuelo para cubrirse del sol y en su mano izquierda blandiendo una hoz para segar el trigo. Personalmente, he de decir, que me recuerda a las innumerables fotos que he visto de mi abuela Luz cuando era joven e iba al campo a trabajar. El canto de la alondra es el canto del primer albor mañanero, el primer albor en que muchos agricultores ya estamos trabajando y hasta el final de día, ahí seguimos.
Archivo:Hay Harvest at Éragny by Camille Pissarro 1901.png ...
Recolección de heno en Éragny
Quizás la localidad picarda de Éragny-sur-Epte no les sea muy conocida, pero si hablamos de Camile Pissarro, pintor francés muy ducho en el puntilismo y en el impresionismo, de orígenes sefarditas y dominicanos, y con la nacionalidad danesa durante toda su vida, quizá les suene más. Éragny-sur-Epte fue inmortalizada una y mil veces más por este prolífico pintor que cabalgó entre el realismo, el impresionismo y los movimientos que darían el pistoletazo de salida a las vanguardias. Una zona - como todas las zonas de Francia - donde la agricultura predominaba y era el principal sustento de mucha gente. Aquí vemos la recolección de heno, que se usaría posteriormente para cebar a los cerdos en pocilgas debido a su fácil digestión.
La cosecha
Pintado cuatro años antes por Pissarro, este cuadro muestra a cosechadores de trigo, sin ningún simbolismo más que el de una imagen costumbrista.
Gustave Courbet - Los campesinos de Flagey que vuelven de la feria ...
Campesinos de Flagey regresando de la feria
Y terminamos nuestra tanda de pintores franceses y realistas con un magnífico cuadro de Courbet, pintado en 1.853, en los albores del realismo y por tanto en su mayor crudeza y realidad. Se trata de yunteros, un oficio que hasta hace poco era costumbre el verlo, volviendo de la feria del pueblo tras una noche de diversión y alborozo, para reincorporarse a las tareas agrícolas.
Las cribadoras de trigo - Wikipedia, la enciclopedia libre
Las cribadoras de trigo
Último cuadro de Courbet. Igual que un cuadro anteriormente aparecido de Millet, aquí se muestra la filtración de trigo, de un modo más efectivo que no consistía en 'aventar', sino en colar los granos de trigo en los coladores.
La siega
Que sería de las representaciones pictóricas de la agricultura sin el toque genial y pícaro español. El cuadro del aragonés universal, de Don Francisco de Goya Lucientes, pintado en aquella época en la que se dedicaba a ilustrar imágenes costumbristas para los tapices reales, cuando todavía no había perdido el oído, ni la sesera, nos muestra una imagen tan real en medio de un ambiente tan, a priori, bucólico. Están los chavales que recogen y apilan el trigo con sus segadoras, otros que se duermen bien por el cansancio o bien por esa abulia tan - desgraciadamente - hispana. 
La siega: la recolección
Gonzalo de Bilbao Martínez, fue un pintor impresionista sevillano, que profundizó en el estilo costumbrista. Eternamente reconocido por Las Cigarreras, a este autor me gustaría dedicarle una entrada en la sección de "Españoles Olvidados", pues poco se habla de él en los libros de Hª del Arte, pero sus pinturas tan realistas, en ese toque satírico-realista que los españoles impregnamos a todo lo que hacemos, también dejaron imágenes agrarias como esta representación de la recolección de trigo pintada en 1.895.
DOMINGUEZ BECQUER, JOAQUIN PINTOR ESPAÑOL. SEVILLA 1817-1879 " LA ...
La vendimia
Se conoce bastante a Gustavo Adolfo Bécquer y a su hermano, Valeriano Domínguez Bécquer, pintor. Sin embargo en la familia Bécquer ha habido prolíficos pintores como el padre de estos dos excelsos artistas en lo suyo, José Domínguez Bécquer, y el primo de su padre, D. Joaquín Domínguez Bécquer que es el que ahora nos ocupa y representó la vendimia. Como diría Antonio Molina: "Vendimia, pasión, locura..." Y así es, el sector vitivinícola ha reportado bastantes beneficios a mi familia y a un montón de familias comarcanas. Lagares, trullos, ir de mosto hasta arriba.
Hans Dahl (Norwegian, 1849-1937) Norwegian Girl, ca. 1905 Frye Art Museum
Niña noruega
Uno de los pintores que más me fascina, el pintor modernista noruego Hans Dahl, también "enterrado" en la historia y desplazado por su coetáneo y contemporáneo Edvard Munch - quién por cierto padeció la mal-llamada "gripe española"- quién pintó escenas costumbristas de Noruega, una nación que es mundialmente conocida por sus fiordos, pero no tanto por su recogimiento rural. Les recomiendo, miren más obras de este magnífico pintor.
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Sin más, el equipo de "Cultura Hespéride" quiere desearles a todos ustedes un Feliz Día de la Agricultura y de la Familia, redundancia ambas celebraciones, pues implican el recogimiento del individuo sobre su propio ser, el encuentro con su propia naturaleza y la búsqueda de riqueza espiritual.

viernes, 8 de mayo de 2020

El III Concilio de Toledo, precursor de la unidad espiritual de España con la Catolicidad.

La historia de España y de la religión católica - entendiendo a la Iglesia Católica Apostólica Romana, redundancia los tres conceptos, como la única Iglesia legítima - ha sido una historia que, conceptualmente, ha sido concebida como de amor y de entendimiento, pero sobre el papel - y tenemos los claros ejemplos de las intrigas de los monjes cluniacenses para la disgregación del Portugal del Reino de León, la cruzada contra el Reino de Aragón por supuestamente haber patrocinado la 'herejía' albigense, la época del Imperio Español o de la intención de Pablo VI, el papa 'conciliar', de excomulgar a Francisco Franco - han sido relaciones tumultuosas. 
Tres Culturas: III Concilio de Toledo
La primera vinculación de España con el catolicismo - y algunos han querido ahí también 'fabular' acerca del posible nacimiento de España como nación - se hace en este III Concilio de Toledo, cuya convocatoria se previó para el día 7 de abril del 589, siendo Recaredo I, rey de España.
Cabe recordar, que Recaredo I se convirtió al catolicismo en el año 587 junto a toda la nobleza visigótica, abjurando de la fe arriana que siempre había acompañado a los visigodos. Aquello fue influencia de su hermano Hermenegildo, quién se sublevó del 580 al 584 contra su padre Leovigildo I, quién jamás asumió la conversión al catolicismo de su hijo, el primero en apostatar del arrianismo, debido a influencia de su mujer, la franca Ingundis y de San Leandro de Sevilla.
                                            San Hermenegildo, instantes antes de morir.
A imagen y semejanza del emperador romano Constantino en el siglo IV d.C. en el Concilio de Nicea, Recaredo I, se sentó como rey entre los obispos, demostrando una imagen de poder y dando trascendencia a este acontecimiento que ya no vinculaba únicamente a suevos y visigodos, sino también a toda la curia y cuerpo doctrinal.
Entre las novedades que se introdujeron en este Concilio, estaba el levantamiento de la prohibición de la celebración de sínodos y luego otras medidas bastante drásticas como la compilación de veintitrés artículos, donde se condenaba la herejía arriana, en el "Edicto de Confirmación del Concilio", donde se estipuló la confiscación de bienes y el destierro, sanciones que iban aparejadas al incumplimiento de lo que esta recopilación contenía, o la introducción y popularización de la cláusula "filioque", en el momento de rezo del Credo, ya que hasta aquel entonces - y por influenica del Concilio de Constantinopla - el Espíritu Santo era proclamado como procedente del Padre, sustituyéndose esta afirmación por la ahora conocida de "en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del padre y del hijo" - en el latín original "et in Spiritum Sanctum, Dominum et vivificantem, qui ex Patre Filioque procedit" - y que se convirtió en obligatorio para todos los conversos desde el arrianismo. Sin embargo, y aún a pesar de pasar por Francia, el Sacro Imperio Romano Germánico o el norte de Italia, hasta 1014 no sería su final aprobación en Roma, y que fue uno de los argumentos esgrimidos para cuarenta años más tarde, en 1054, romper definitivamente con los patriarcas de Oriente de la suprema autoridad de Roma, precursora de aquella famosa Querella de las Investiduras. Incluso, el modo de vida germánico se llegó a abandonar, produciéndose una "romanización" superior y más rápida que desde la conquista romana de la Península Ibérica. Se declaró anatema al arrianismo, abrazándose la fe católica, teniendo en cuenta los precedentes de los Concilios de Nicea, Constaninopla, Éfeso y Calcedonia, conminando a que godos y suevos fueran instruidos en la única fe verdadera a nuevos efectos.
Fue una total ruptura con todo lo arriano y en definitiva, con toda la cultura germánica, una cultura que por otra parte había admitido e incorporado todo lo de sus precursores romanos, como así lo atestiguará el "Liber Iudiciorum" o Fuero Juzgo que en el 654 d.C., bajo el reinado de Recesvinto I, que en cierto modo venía a "mejorar" el Breviario de Alarico y el Código de Leovigildo, los principales cuerpos jurídicos de la España visigótica. Tanto fue así que se ofrecieron dos versiones contrapuestas, del Leovigildo padre como alguien batallador y aguerrido - bastante injusto, pues él si que puede considerarse un auténtico Padre de la Patria, ya que con él puede empezar España - se presentó Recaredo como un rey pacífico y religioso.
Se opusieron únicamente el obispo arriano de Mérida, Sunna, y los nobles godos, Segga y Vagrila, quiénes intentaron asesinar a Masona, obispo católico, y a Claudio, dux de Lusitania, quién ante la asonada de Segga para ser rey, sofocó su rebelión y le castigó cortándole las manos, haciendo que Vagrila, temeroso, tuviera que refugiarse en la Basílica de la Santa Eulalia de Mérida, para posteriormente ser indultado por el obispo arriano de Masona.
El arrianismo - herejía de la Iglesia Católica, surgido en el siglo III d.C., que negaba equiparar en divinidad a Cristo con Dios Padre - acabó por desaparecer completamente de la vida pública, permaneciendo más como una rémora del pasado que como uno de los elementos configuradores de la primera España.
En conclusión, este Concilio no fue únicamente el precursor de la unidad espiritual de España con la Catolicidad - se considera al padre de la nación española a Leovigildo, recordemos - sino que también introdujo novedades como un catecumenado más profesionalizado, la celebración de sínodos y la introducción de "...y en el hijo"
JAVIER RAMOS BELTRÁN, A 8 DE MAYO DE 2.020

Fuentes bibliográfica:
espanaenlahistoria.org
Hernández Villaescusa, Modesto (1890). Recaredo y la unidad católica. Estudio histórico-crítico.

En homenaje de mi querida abuela Luz

Tal día como hoy, hace 91 años, nació mi querida abuela, Dª María Luz García Arenas, fallecida hace ocho meses, el día 1 de abril de 2022. H...